Yo conozco tu obras. Por eso, he puesto delante
de tí una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar, pues aunque tienes poca
fuerza has guardado Mi palabra y no has negado Mi Nombre. He
aquí, de la sinagoga de satan, de los
que dicen ser Iehudim y no los son, sino que mienten, Te daré alguno. Yo haré
que vengan y se postren a tus pies reconociendo que Yo Te he amado. Por cuanto has guardado la palabra de Mi
paciencia, Yo también te guardaré en la hora de la prueba que ha de venir sobre la era presente, para
probar a los que habitan en esta era. He aquí, Yo vengo pronto; retén lo que
tienes, para que ninguno tome tu corona. Al vencedor Yo lo haré columna en el Tabernáculo
de Mi אלהא, y nunca más saldrá de allí. Escribiré sobre él el
Nombre de Mi אלהא, y el nombre de la ciudad
de Mi אלהא , la cual es la Ierushalayim nueva, la cual desciende
de los cielos de Mi אלהא y yo escribiré sobre el Mi Nombre nuevo.
(Revelación
3:8-12)
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